Todos necesitamos tiempo.
Tiempo para sanar, para pensar, para estar solos, para tomar una decisión, para afrontar las cosas. Porque no podemos hacer todo rápido, no podemos afrontar una perdida, ni tomar una decisión en un segundo.
Porque hay decisiones, hay pequeñas cosas que pueden hacer que nuestra vida cambie para siempre.
Necesitamos tiempo, para todo.
El problema es que no tenemos tiempo.
No podemos estar solos siempre , ni afrontar las cosas con el tiempo que quisiéramos, no podemos afrontar y tomar una decisión en el tiempo deseado.
Porque la vida se nos va.
Y se supone que tenemos que vivirla al máximo, no?
Parece imposible poder hacer las dos cosas, parece imposible "vivir la vida al máximo" cuando tenemos que tomar decisiones muy importantes, cuando queremos enfriar momentos o despedirnos de alguien.
Parece que el tiempo se va, corre, todo sigue y nosotros estamos parados en medio de una avenida y en contra de la corriente, sin poder ni siquiera responder o movernos, sin ni siquiera movernos.
Quizás necesitemos un tiempo para reflexionar y estar tranquilos hasta darnos cuenta de que tenemos que seguir adelante.
Quizás las decisiones las tomamos como nos parezca, y nos equivocaremos una y mil veces, porque la vida se trata de eso.
Caerse y pararse cuantas veces sea necesario.