La mejor parte que podemos saber es que todo lo que un día comenzó tarde o temprano llega a su fin. Sea bueno o malo nada puede desafiar a la regla de principio, nudo y desenlace. Aunque las nubes cubran nuestro cielo y parezca que la lluvia no va a parar, no debemos desesperar porque el sol esta ahí detrás y siempre vuelve a brillar. Si las cosas se hacen desear es una buena señal. Y si de las cosas malas malas no se ve una salida de emergencia, recuerda que todo pasa. No hay mal que por bien no venga, se dice a menudo. Yo se que si un problema tiene solución no hay caso preocuparnos, y si no tiene solución mucho menos, hay que olvidarlo. Después de todo son estos problemas lo que hacen la vida mas interesante y que no olvidemos que seguimos respirando.